martes, 21 de octubre de 2008

Mi Proyecto final de Ciclo de Ilustración (y otros)

Empiezo aquí mi blog con dibujos, ilustraciones y cosicas varias, que me gustaría ir añadiendo poco a poco.

Mi estilo es el Cartoon y cómico español de toda la vida, vaya... Aunque desarrollo otros muchos estilos, éste es con el que más a gusto estoy. Decidme infantil, o vago... pero, oye, éste es el que me va.


"Paranormality" era el título de un cortometraje de siete minutos y pico de duración, que realicé como proyecto final de carrera entre el 2006 y el 2007. La cosa era tratar de desarrollar un estilo diferente al que, hasta ese momento, solía utilizar en mis ilustraciones (muy tipically spanish). También intentaba conseguir una buena animación de personajes de manera tradicional, sin tener que utilizar el Flash (y me puse a dibujar cada fotograma uno a uno, a lo masoca)... me costó sus tres meses de penurias (y unas navidades particularmente duras), pero logré acabarlo, y mira, no me fue mal en la presentación, no...

La historia iba acerca de las desventuras de dos frikis: un investigador paranormal a lo John Constantine, más parecido a el arquetipo de protagonista de cualquier novela de Stephen King, y un corpulento aventurero de poco cerebro pero de gran corazón (como se suele decir), que eran invitados al típico castillo embrujado y fantasmal. Todo el corto tiene más bien una ambientación a lo Tim Burton y unos personajes cartoon de proporciones imposibles. Se verá que en el apartado musical suenan melodías de cierta serie japo de animación... esque yo también soy un maldito friki.

E aquí algunas escenas del susodicho corto (escenas sueltas), así como la introducción del mismo (más abajo) y el final sorpresa para los que se quedaban después de los créditos:


Lo cierto es que, al verlo después de tanto tiempo, le noto muchos fallos y limitaciones que en ese momento, por falta de experiencia, de buenos medios o de tiempo, no percibí. Claro que era mi primer cortometraje medio en serio, después de varias animaciones añejas y baratillas, casi siempre hechas para pasar el rato. De entre ellas, una de las que más gustaron a mis compañeros de curso fue la siguiente. (Madre mía, en qué estaría yo pensando...)

Sobran las palabras.

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